“Nuestro objetivo final es nada menos que lograr la integración del cine latinoamericano.
Así de simple, y así de desmesurado”.
Gabriel García Márquez
Presidente (1927-2014)
NOTICIA
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Producción de Latinoamérica, otra vez protagonistaPor Ernesto Pérez
El cine latinoamericano confirma su estado de gracia con cuatro películas en concurso de la 37 edición de la Fiesta del Cine de Roma, que se celebrará del 16 al 24 de octubre de 2015. Así lo anunció en conferencia de prensa Antonio Monda, el nuevo director del festival italiano, que ha vuelto a asumir el nombre que tenía en sus comienzos, subrayando su deseo que la manifestación recupere el clima festivo y despreocupado que caracterizaba sus primeras ediciones.
Después del Oso de Oro en Berlín cosechado por la película El club, del chileno Pablo Larraín, y el León de oro y el de plata en Venecia de Desde allá, del venezolano Lorenzo Vigas, y El clan, del argentino Pablo Trapero, respectivamente, el cine latinoamericano aspira a más logros en Roma.
Latinoamérica aspira a estatuillas del jurado popular con los filmes mexicanos La delgada línea amarilla de Celso R. García y Distancias cortas de Alejandro Guzmán Álvarez, además de la argentina Eva no duerme de Pablo Agüero y la brasileña Campo grande, de Sandra Kogut. Y eso sin contar el homenaje al chileno Larraín con la proyección de sus cinco largometrajes o la presencia en la reseña paralela Alicia en las ciudades de Alias María del colombiano José Luis Rugeles Gracia, ya visto en Cannes.
La Fiesta romana, que no es un festival de serie A como Cannes, Berlín, Venecia o San Sebastián, al aceptar en concurso filmes ya vistos en otras reseñas cinematográficas (como el argentino Eva no duerme, ofrecido Toronto, este año se distingue por una serie de novedades.
Por ejemplo, no hay un jurado de especialistas sino uno popular que vota por Internet, abundan los documentales y hasta hay dos series televisivas exitosas en la muestra.
En la reseña oficial se nota una abrumadora presencia norteamericana con siete títulos (ocho si se incluye la coproducción con Australia Truth, de James Vanderbilt, con Cate Blanchett y Robert Redford) uno de los cuales un documental de Paul Thomas Anderson, seguida por Italia con cuatro obras, Francia con tres y España, Gran Bretaña y México con dos. Cabe señalar que lo que se verá en Roma de cine norteamericano es totalmente independiente (luego que naufragara la invitación a Steven Spielberg de presentar en primicia mundial su nuevo film Bridge of Spies con Tom Hanks y Amy Ryan) pero agrupa títulos interesantes como Freeheld de Peter Sollett, con Julianne Moore en el rol de una policía lesbiana enferma de cáncer que trata de conseguir para su joven amante (Ellen Page) una pensión de viudez, The Walk-3D de Robert Zemeckis, sobre el equilibrista francés que el 7 de agosto de 1974 caminó sobre un cable tendido entre las dos torres gemelas de Nueva York y Truth de James Vanderbilt sobre el escándalo del programa TV que reveló la supuesta evasión del servicio militar en Vietnam del presidente George W. Bush.
La ausencia de superproducciones repercute en todo el programa de la Fiesta y probablemente en la ausencia casi total de estrellas de primera magnitud (Monda habló solo de Ellen Page y Monica Bellucci) y la consiguiente abundancia de historias de amor y de crónica cotidiana.
Una de estas excepciones es la china Caza al monstruo que llega precedida de la fama de ser la película más taquillera del año y que ha sido dirigida por uno de los animadores de Shreck, Raman Hui, mientras La estrella que susurra del japonés Sono Sion es un filme de fantasía y ciencia sobre un mundo dominado por robots que asisten a una minoría de humanos sobrevivientes.
Vidas privadas también en el cine latinoamericano que se verá en Roma: Campo grande de la documentalista Sandra Kogut habla de dos niños abandonados por su madre, La delgada línea amarilla y Distancias cortas de Celso R. García y Alejandro Guzmán Alvarez, respectivamente, de cinco pintores de ruta y de un obeso crónico, cansado de vivir solo mientras Eva no duerme del argentino Pablo Agüero recuerda las vicisitudes por las que pasó el cadáver embalsamado de Eva Perón.
Una curiosidad promete ser el documental español de Álvaro Longoria, The Propaganda Game que entrevista al único extranjero que trabaja para el gobierno norcoreano como jefe de relaciones culturales con el extranjero, el también español Alejandro Cao de Benós.
(Fuente: ANSA)
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